Una
canción de hace unos cuantos años, RESISTIRÉ, del Dúo Dinámico, se ha convertido de la noche a la mañana, o mejor
dicho dadas las circunstancias, de la mañana a la noche, en un himno de lucha y
fortaleza para hacer frente a la pandemia que a todos nos tiene dominados, ya
sea por auténtica preocupación, ya sea por obsesión.
Nada
hacía prever que un tema pegadizo, comercial, eficaz en su función de
entretenimiento pero sin grandes pretensiones, se tornara en una llamada a
mantener la fortaleza de ánimo y a la lucha ante una situación adversa.
En
los últimos años, cada vez que un grupo de gentes, ya fuera pequeño , ya
grande, incluso un país, se veía acometido por algún hecho que amenazaba su
forma de vivir o incluso su existencia, el himno de guerra y resistencia solía
ser NO NOS MOVERÁN.
Quizá
tenga su sentido que la canción del Dúo Dinámico haya desplazado de su lugar de
pieza de resistencia al NO NOS MOVERÁN.
Sonaría
a broma pesada el hecho de cantar una canción
que dijera que nadie se iba a mover cuando lo que realmente ocurre es
que de momento no podemos movernos de ninguna manera.