Siempre será más divertido suponer
que tras el asesinato de kennedy había toda una conspiración que conformarse con la hipótesis de un asesino
solitario, lo cual desde luego no elimina la posibilidad de que tal
conspiración existiera.
Las teorías de la conspiración tienen
a su favor un dato cierto de carácter antropológico: el misterio es siempre
atractivo.
Se ha llegado a decir que Hitler no
murió en el búnker de la cancillería sino que consiguió escapar a la Argentina.
Nada nuevo bajo el sol: en la Edad Media se creyó que el emperador Federico I
Barbarroja no estaba muerto sino que estaba dormido. En Portugal existió la
mentalidad "sebastianista" que suponía que este joven y atolondrado
rey Sebastiao no había perecido en la batalla de Alcazarquivir sino que seguía
vivo y algún día volvería para regir de nuevo los destinos de Portugal y
administrar justicia.
Las teorías de la conspiración
comparten el mismo marco mental que algunos argumentos tradicionales de la
teología racional para tratar de demostrar la existencia de Dios: la obsesiva
negación de la casualidad en favor de la causalidad. Un argumento tradicional
denominado por Kant argumento físico teológico, afirma la existencia de Dios a
partir del orden observado en el mundo. Kant rechazaba tanto este argumento
como todos los demás que por vía teórica pretendieran afirmar la existencia de
Dios. Dado que es improbable que el orden surja del azar se infiere de ahí la
existencia de una suprema inteligencia creadora de tal orden. Se da un salto de
lo improbable a lo imposible y de paso se infiere la imposibilidad del azar.
El azar existe, la casualidad
también. El caos nos inquieta y las teorías de la conspiración nos dan
tranquilidad
Otro asidero de los defensores de las
teorías de la conspiración se basa en el hecho indudable de que nunca sabremos
toda la verdad. Sus defensores parten de este hecho obvio para deducir que
puesto que no sabemos toda la verdad es falso todo lo que sabemos y por tanto
hay que dar por verdaderas las conclusiones que su ideación paranoide nos
quieren imponer.
¿ Se puede discutir con los amantes
de las teorías de la conspiración? Es imposible puesto que su mente funciona de
forma inversa a lo correcto. No llegan a la convicción tras la evidencia
sino que llegan a su "evidencia"
tras una convicción previa. Sus convicciones crea evidencias. No hay nada que
hacer y menos en facebook.